Bijū
Bijū (尾獣 "Bestias con colas") es el nombre con que se alude a diez demonios o yōma (妖魔 fantasma, aparición)
Origen e historia
Se dice que originalmente, debido a la corrupción de los humanos, existía un terrible y muy poderoso demonio, cuya esencia y poder, más conocido como chakra, era infinito y al que solo Rikodou Sennin, el fundador legendario del mundo ninja, pudo vencer y fue gracias a ello que la gente lo veneró como a un dios.
Sin embargo, era tal la fuerza demoníaca de esta bestia, que el maestro tuvo que desarrollar una técnica especial para encerrar el infinito chakra del biju dentro de su propio cuerpo, con lo cual se convirtió en el primer jinchūriki (Poder del Sacrificio Humano)
Cerca a su muerte y consciente de que al morir el Biju volvería a ser libre, Rikoudou usa sus últimas fuerzas y logra dividir el chakra de la bestia en nueve partes a las que dispersa por el mundo, las cuales serían los nueves bijus que conocemos, desde el Ichibi al Kyubi. Por último crea la Luna y oculta el cuerpo original del Jūbi en ella, debido a que ningún humano podría ser capaz de alcanzarla.
Posteriormente, casi todas las guerras que se mencionan fueron con el único objetivo de querer obtener el poder divino de aquellas poderosas bestias para usarlas en su favor. Durante la Tercera Gran Guerra Ninja las Aldeas Ocultas intentaron adquirir control sobre distintos Bijū para usarlos en la lucha, pero pronto quedó claro que su manejo era muy difícil, ya que a pesar de ser partes más pequeñas del que fuera alguna vez un ser más poderoso, los bijus posen los chakras más poderosos del mundo y que enfrentarse a ellos, es como encarar a un dios.
Una forma que se encontró de mantener controladas a estas criaturas y aspirar a dominarlas aunque sólo parcialmente fue recrear la técnica usada por el Rikuodou Senin, es decir del sellado dentro de personas, tal y como sucedió con Gaara de la Aldea oculta de la Arena y Naruto de la Aldea Oculta entre las hojas (konoha).
La Organización Akatsuki, fundada por Uchiha Madara, pretende reunir a todos los bijus para luego revivir al biju original y usando su poder lanzarse al control del mundo.
Sus distintos miembros van por ahí buscando y persiguiendo a los Bijū en estado libre o a los Jinchūriki que los mantienen sellados en su interior. Tras capturarlos, sellan el alma del demonio en una gran estatua. Si estaba dentro de alguien, el humano muere en la operación.
No hay comentarios:
Publicar un comentario